Depende de quien tú dependas.
En la soledad de un despertar frente al esplendoroso amanecer, con un cielo de tintes rosados lleno de esperanza, medité en mi oración matutina, ¿cómo puedo ser feliz? y me fijé esta premisa: «Depende de quien yo dependa». Así es; En Mateo 5:1-12 Jesús nos muestra que somos bienaventurados los que nos hemos apropiado de …