Hablemos de Noviazgo

Debemos decir que suena a desatino hablar de noviazgo en el siglo 21, ya que es una palabra que ha perdido su verdadero significado. Los antiguos parámetros en las relaciones entre solteros tienden a desaparecer, puesto que conocerse, salir, acostarse, toma solo 24 horas para la mayoría. No es de extrañar entonces el altísimo porcentaje de fracasos matrimoniales que ocurren en los primeros cinco años de matrimonio, los cuales no se producen por el matrimonio mismo, sino por una errónea elección de cónyuge y pésimo manejo del conocimiento y relaciones previas de la pareja.

El ámbito cristiano no escapa a esta situación. Basta decir que un líder de una gran y fuerte denominación declaraba apesadumbrado que su denominación había celebrado 586 matrimonios en un año y que el 80% de las novias o estaban embarazadas o no debían vestirse de blanco ¿Cuantos de esos matrimonios como remedio estarán camino al fracaso?

Nos proponemos hablar seriamente acerca del tema y analizaremos algunas estadísticas de lo que piensan los jóvenes en edad universitaria. Las muestras han sido hechas a un mínimo de 100 jóvenes de ambos sexos y son parte del capitulo “Adolescencia “del libro “Psicología “, editado por el Fondo Educativo Norteamericano SA.

Es interesante notar que las citas amorosas son bajas en relación a las fantasías sexuales. Se aprecia ausencia de intimidad y la tendencia a una relación utilitaria donde prima lo físico. En cuanto al enamoramiento pareciera ser un área desconocida donde solo la pasión es el centro para comunicarse ¿Miedo o desconocimiento del verdadero sentido del amor? El porcentaje de culpa que se confiesa es bajo, lo que indica una ética personal relativa e individualista.

Algo sucede a nivel de estos jóvenes, hombres y mujeres, que solo se unen pero no se comunican. Su verdadera alma es desconocida para sus compañeros. El profeta Amos nos diría en el capitulo 3 verso 3 ¿Podrán caminar juntas dos personas si no están de acuerdo?

Nos toca preguntarnos si la juventud cristiana tiene un comportamiento diferente, ya que no hay estadísticas de Iglesias cristianas al respecto. Quizás nos da miedo enfrentar la realidad. El Dr. Les Carter en su libro “El cónyuge prodigo “, nos habla de un 20 a 40% de jóvenes que asisten a Iglesias cristianas y que no responderían algo diferente a los encuestados. En mis viajes por América Latina incluyendo USA. Pastores me han hecho la misma pregunta ¿Que puedo hacer con los jóvenes?

Por otra parte, la Biblia no habla sobre noviazgo y que conducta se espera del creyente, excepto la prohibición de la fornicación y relaciones homosexuales. Si hay principios que son aplicables y precisan de un serio análisis.

Hay una pregunta que he hecho en casi todas partes al hablar con las jovencitas de una Iglesia cristiana: ¿Cual es la diferencia entre un joven cristiano y un incrédulo? Invariablemente la respuesta ha sido: “la diferencia entre un joven cristiano y uno mundano, es que el mundano te invita a la cama a las 48 horas de conocerte y el cristiano espera 15 días».

Estas son las cuatro inquietudes mas frecuentes de jóvenes cristianos de ambos sexos: (3)

1 ¿Porque los cristianos relacionan sexo con pecado?

2 ¿Porque esta mal tener sexo antes del matrimonio?

3 ¿Si dos personas se aman y van a casarse, porque abstenerse de sexo?

4 Aun cuando la promiscuidad sexual esta prohibida en la Biblia ¿Porque los cristianos la ven como uno de los pecados mas serios?

No esperaríamos estas dudas en jóvenes que asisten a nuestras Iglesias, cantan y alaban, se reúnen y caminan con una biblia bajo el brazo. Sin embargo la queja de ellos es la falta de ejemplo en quienes somos líderes y la doble vida en varios matrimonios cristianos que asisten a la Iglesia. Aparte de eso a veces son testigos de las libertades sexuales que se toma un pastor, no es de extrañar entonces que algunos digan que los no cristianos son mas honestos pues no ocultan ni niegan lo que hacen.

Esta es la realidad de nuestra juventud hoy, y a ellos hay que hablarles con seriedad acerca de noviazgo y relaciones personales. Debemos romper la burbuja espiritual que hemos mantenido y con responsabilidad ante Dios y su Palabra aconsejar adecuadamente, hacer una labor preventiva seria y profesional, no asustando con las penas del infierno sino con el desafió a experimentar la tremenda bendición de aprender a vivir cristiana y responsablemente en la juventud.

La falta de modelos positivos no solo genera libertades y conductas relativas, también daños emocionales en los que son víctimas de relaciones inadecuadas. En este sentido es necesario definir el fundamento básico en el que nos vamos a mover. No podemos funcionar sin un modelo que sea valido y confiable y en este sentido hay dos opciones:

A) Vivimos en un universo el cual tiene leyes físicas que son inmutables lo cual le da sentido y propósito, y en un punto casi invisible de el existe el hombre, el cual es creado por Dios así como todo lo que existe. Hay valores absolutos y el hombre como ser espiritual y racional puede conocer a Dios y el propósito para vivir así como un modelo de vida que le traerá significado y realización. Conocemos a Dios a través de las cosas creadas y de su Palabra que ha llegado a nosotros. La Biblia. Un manual de vida.

B) Somos un accidente en un universo cuyo verdadero origen se desconoce, fruto de un proceso macro evolutivo, a través del cual por azar y tiempo, hemos llegado a ser los animales mas avanzados (lo cual es relativo pues ningún animal destruye su entorno y por ende a si mismo). Nos rigen las leyes naturales y es nuestra propia responsabilidad establecer las normas legales y morales de vida y convivencia. Nuestra mayoría de edad se afirmo al despojarnos de los mitos religiosos en la edad moderna y cambiamos el principio de «Dios es la medida de todas las cosas, por el hombre es la medida de todas las cosas «

Basta un simple análisis del curso de la historia humana en el siglo 20 hasta ahora para darnos cuenta del fracaso del hombre en entenderse a si mismo, al prójimo y a la naturaleza. Ni la sociología ni la psicología han sido capaces de ofrecer una solución verdadera. Es urgente una respuesta y debemos probar seriamente con la opción A, la cual no es religiosa sino espiritual.

En primer lugar, el hombre descubre el sentido para su vida al relacionarse con Dios y establecer comunión con El. Comienza a tener una correcta percepción de si mismo, del prójimo y de la naturaleza. Acepta que el obedecer y seguir las instrucciones del Creador le permiten desarrollarse como persona y a la vez ayudar en el desarrollo de otros. No podemos dar amor verdadero a menos que el amor verdadero este en nosotros. Es interesante que la Biblia al decir quien es Dios, dice: «DIOS ES AMOR «

Dado que el amor es el motor en las relaciones, debemos distinguir entre este y la amistad. La amistad es la capacidad de hacer y conservar amigos. Pero los amigos vienen y van. En los años de estudiante hacemos amistades que parecen muy firmes pero luego que nos graduamos o cambiamos de ciudad, dejamos de vernos y lentamente van desapareciendo. No nos afecta grandemente puesto que vamos haciendo nuevas amistades y tratamos de conservar las mas antiguas lo mejor que podemos.

Sin embargo las relaciones entre personas que se aman son muy diferentes. Hablamos de «enamorarse». De pronto nos damos cuenta que gradual o súbitamente sentimos una atracción intensa de toda nuestra personalidad hacia alguien del sexo opuesto y nuestro deseo en un modo irresistible es estar todo el tiempo con el o ella. Necesitamos su presencia y compañía. A diferencia de la amistad, esta sensación no cambia en la distancia o en el tiempo ya que prácticamente captura nuestro pensamiento. Seguramente todos hemos sentido esto. Además nos es difícil distinguir entre el amor y la pasión, siendo esta ultima el gatillo que dispara preferentemente las relaciones físicas.
Al estar fuertemente involucrada el área física se pueden presentar varios peligros;

1) La relación sentimental puede afectar y cambiar nuestros objetivos o metas. Estudiamos menos, o si trabajamos puede afectarse nuestra productividad.
2) Podemos vernos involucrados en un embarazo no deseado y una salida inmoral como el aborto, lo cual será una experiencia dolorosa que nos acompañara toda la vida.
3) Darnos cuenta que no estamos preparados para una relación así, ya que somos dependientes de nuestros padres y no autónomos, dando por terminada la relación y afectando seriamente las emociones de la otra persona.
4) Incluso, después de un tiempo aburrirnos y sentirnos atraídos por otra persona y comenzar de nuevo el mismo ciclo.
5) Es posible que sea una relación donde ya estemos en capacidad de asumir responsabilidades por nosotros mismos y nos sintamos listos para un proyecto matrimonial. Sin embargo esta «excitación tan tremenda y maravillosa» no es suficiente. Debemos agregar paciencia y juicio, para que esta intensidad emotiva no anule nuestro sentido de la realidad.
Aun cuando la Biblia no habla extensamente este tema, nos da principios que son aplicables y suficientes para un joven que desea una guía sana y eficiente:

1) «Todo lo que hagáis hacedlo de corazón «Colosenses 3:23
La sinceridad y honestidad deben primar en las relaciones sentimentales. Debe haber coherencia entre los principios bíblicos que hemos decidido seguir y lo que hacemos ya que no es correcto delante de Dios jugar con los sentimientos de otra persona. «Lo que sembramos cosechamos «.
2 «Por lo cual desechando la mentira, hablad verdad cada uno con su prójimo «Efesios 4:25
La mentira tiene varias formas y una de ellas es que el fin justifica los medios ¿Que estas dispuesto a hacer para conquistar y convencer la persona que te excita? A veces cuando dices «te amo «, lo que verdaderamente dices es «te deseo». Recuerda que los varones no sabemos mentir y somos pillados fácilmente. No digo que las mujeres no mienten, pero no somos tan hábiles para descubrirlo. No sigas con una relación si realmente te das cuenta que ya no la quieres mantener ¿Cómo se afectara la otra persona?
3 «Haced morir pues lo terrenal en vosotros: fornicación, impureza, pasiones desordenadas, malos deseos y avaricia «Colosenses 3:5
La fornicación o inmoralidad sexual, tiene que ver con intimidades perniciosas. El sexo es algo extraordinario dado por Dios al hombre. La emoción mas elevada es el amor y su expresión es el sexo. Sin embargo, el sexo es una intimidad que te une no solo físicamente, sino que implica todo lo que tú eres: espíritu, alma y cuerpo. Es estar dispuesto a asumir un serio compromiso, el cual no existe en un simple noviazgo como lo entendemos hoy.

El mito de la necesidad de llegar con experiencia sexual al matrimonio, tiene mucho que ver con los matrimonios que fracasan. Desaparece la luna de miel, puesto que ya se ha probado toda la miel antes y a veces fue mejor que la miel que te ofrecerá tu cónyuge ¿ Como sacar eso de tu mente, las inevitables comparaciones, el encuentro después de un tiempo con aquel o aquella que te hizo vibrar en tu «aprendizaje de soltero» ? Cuantas veces no he escuchado estas situaciones en sesiones de consejería personal. Amo a mi cónyuge y quisiera sacar de mi mente esos recuerdos para poder entregarme totalmente.
Déjame decirte que este tipo de situaciones afecta principalmente a las mujeres, ya que los hombres pueden separar el sexo del amor. Un consejo para ellas: los hombres se divierten con las que dicen que si y se casan con las que dicen que no.
No son pocos los sexólogos que aseguran que la pareja que llega virgen al matrimonio y con una buena orientación sexual tiene las mejores posibilidades de ajuste pues lo que hagan les parecerá nuevo y extraordinario. Es el testimonio de uno de los mejores jugadores del Real Madrid, el brasileño Kaká quien es cristiano.

Cuando la Biblia habla de pasiones desordenadas se refiere al aspecto físico del libertinaje sexual. Este puede conducir a contraer enfermedades de tipo sexual, incluso algunas agudas que dejan secuelas para toda la vida incluyendo la esterilidad ¿Valdrá la pena el riesgo que luego te afectara con la persona que amaras para toda la vida? Preservativos masculinos o femeninos no alcanzan el 100 % de protección que seria lo deseable.

Los malos deseos se refieren al aspecto mental. El 60% de los hombres y un 35% de las mujeres están involucrados en pornografía, a través de la cual incluyendo masturbación se obtiene satisfacción. Alimentando malos deseos con la pareja y luego satisfaciéndolos solitariamente. Psicológicamente se considera una adicción y va a continuar aun ya casado.

«Hay camino que al hombre le parece derecho, pero su fin es camino de muerte «Proverbios 14:12

El camino que parece derecho es cuando flexibilizamos aquellos valores y principios absolutos que la Biblia aconseja. Disfrutamos el presente, pero lloraremos en el futuro. Por desgracia nuestras ideas se hallan tan coloridas por la vida moderna, que pensamos que esta excitación y emoción de «estar enamorados «es irresistible y que no exige el juicio sereno que damos a otras cosas menos importantes.

REFLEXIONA

Tiene importancia vital el considerar cual ha de ser nuestra conducta en el caso de sentirnos enamorados o relacionarnos. Desde el punto de vista cristiano debemos analizar:

Si yo soy cristiano y la otra persona no ¿No pondré en tensión mis valores y principios…hasta que punto podre decir SI o NO cuando deba hacerlo? …¿Tiene razón el consejo bíblico de «no unirme en yugo desigual con un no cristiano»? De pronto tengo la ilusión de poder influir en el o ella para que tome el camino cristiano ¿En la realidad quién convence a quién? Esto se ve en el juego que Sansón hizo con Dalila y mira como termino Sansón. Jueces 13 al 16 A.T.

El establecer una relación sentimental implica dar más que recibir. Tengo que tener mi propia vida definida como un proyecto con metas y objetivos claros, caso contrario comienzo a depender de la otra persona y la convierto en mi seguridad. Esto implica la necesidad de una vida cristiana solida en principios y prácticas, donde Jesucristo es el centro.

Preferentemente deberé relacionarme emocionalmente con otros cristianos, no porque será perfecto sino posiblemente menos malo. Aprender a diferenciar amigo y compañeros del entorno, los cuales son el campo para compartir mis principios. El compartir tu fe en Cristo, crea un marco de seguridad para ti y afirma cada vez más tus valores. Créeme que quienes te rodean sin ser cristianos al tener problemas vendrán a ti en busca de consejo.

Como me escribe un joven australiano que nació en un hogar cristiano y luego de enrolarse en la marina conoció el mundo y lo vio y vivió de otra manera: «he regresado a la vida cristiana y se que la exigencia es fuerte en compromiso y estilo de vida. Se necesita coraje para vivir los principios cristianos en el mundo de hoy, pero la paz y seguridad que se experimenta es reconfortante. Estoy pronto a un feliz matrimonio con una chica también cristiana»

DECIDE EVALUAR

Si estas en una relación que lleva entre tres y seis meses y estas pensando en serio y la otra persona es cristiana, he aquí algunas sugerencias de Ben Young y Samuel Adams en su libro, «»Los diez mandamientos del noviazgo «(p. 32):
¿Me es grata esta persona como amiga?
¿Hay un sentimiento mutuo de dar y compartir?
¿Hay algún aspecto de su vida o su personalidad que yo no pueda tolerar?
¿Puedo tener gozo compartiendo mi tiempo con esta persona si nos abstenemos del contacto físico?
¿Me siento estimulado y requerido por esta persona?
¿De qué manera nos beneficiamos mutuamente?
¿De qué manera nos herimos mutuamente?
¿Tiene mal carácter o una excesiva acumulación de cosas hirientes?

Aprecie la pasión de un amor romántico por lo que es, pero luego diríjase hacia la madurez y utilice su cerebro sometiéndose a principios. Después de todo es una de las más importantes decisiones de toda su vida. El no hacer caso a las señales de advertencia que Dios nos da a través de su Palabra y las circunstancias, nos hará despertar un día desilusionados al descubrir en nuestra pareja importantes defectos de carácter.

Una vez que hemos conocido de Dios, podemos apartarnos y pecar, pero siempre El esta dispuesto a perdonar y ayudarnos a reemprender el camino de nuevo. Si este es tu caso, levántate y vuelve a caminar con Dios y su Palabra.